La revista Marie Claire España entrevista a Pilar Fernández Pascual, presidenta de nuestra Asociación Española Cáncer de Mama Metastásico, AECMM, para conocer nuestra visión sobre los nuevos tratamientos, y el presente y futuro del CMm.
El cáncer de mama metastásico (CMm), se produce cuando el cáncer de mama se extiende a otras partes del cuerpo. Es una patología que no tiene cura y que desarrollarán cerca del 30 % de las mujeres a las que se les diagnostique cáncer de mama.
El reto en investigación para esta enfermedad se encuentra en desarrollar fármacos que consigan cronificarla, frenar su avance para que las pacientes puedan vivir con una buena calidad de vida durante una media de 20 años. Desde la AECMM prestamos apoyo e información tanto a las pacientes como a sus familiares, y promovemos y buscamos vías de financiación para apoyar proyectos de investigación en el cáncer de mama.
¿Cómo se sienten las pacientes de cáncer de mama, en general, y las del metastásico, en particular?
Son realidades absolutamente diferentes. Cuando tienes un cáncer de mama y pasan uno o dos años, vuelves a tu vida, a tu realidad. Siempre vas a vivir pendiente de la enfermedad, porque vas a tener controles, miedo e incertidumbre toda la vida, pero puedes recuperar tu vida en cierto modo.
Cuando tienes una metástasis no, porque esa normalidad ya no existe. Primero, porque vas a ser una enferma para siempre, hasta que se consiga que llegue a ser una enfermedad crónica, que esperamos que sea muy pronto, gracias a los avances en investigación y a la medicina de precisión. Generalmente, cada tres meses te realizan controles a ver si la enfermedad ha progresado o la metástasis se ha ido a otro órgano; los tratamientos y sus efectos secundarios son también para toda la vida, y no puedes llevar una vida como la que llevabas antes.
¿Cómo valora el acceso de las pacientes a los nuevos fármacos?
En España existe una gran paradoja: somos el primer país de Europa en ensayos clínicos (y el segundo del mundo después de Estados Unidos) y, sin embargo, los fármacos que se desarrollan no nos llegan ni se aprueban con celeridad.
De nada nos sirve apoyar la investigación si a la hora de recoger sus frutos (en forma de fármacos y terapias innovadoras) no nos llegan. El nivel de los investigadores en España es altísimo, pero a la hora de incorporar estos nuevos medicamentos a nuestra cartera sanitaria, es decir, que sean financiados por nuestro sistema sanitario, estamos en el puesto número 13 respecto a otros países miembros. No podemos entender que incluso alguno de esos fármacos que se han investigado en España estén financiados en otros países y aquí no.
Hemos conseguido recientemente que se financien dos fármacos vitales para tratar dos subtipos de cáncer de mama metastásico pero quedan otros. Tienen que crearse criterios garantistas de que todas vamos a tener acceso a esos fármacos independientemente del país, comunidad autónoma u hospital en el que nos estemos tratando.
¿Cómo ves el futuro del cáncer de mama metastásico?
Veo muy cercano que pueda convertirse en una enfermedad crónica. La investigación avanza muy rápido. Ahora no hay un solo tipo de cáncer de mama, sino varios, porque están los subtipos dependiendo del perfil genético y molecular de cada paciente. Se están detectando muchísimas mutaciones y fármacos diana dirigidas a ellas.